martes, 19 de enero de 2010

100119.030 - El juego de las golondrinas (Zeina Abirached, 2008)






“Morir, marcharse y regresar es el juego de las golondrinas”, reza un muro de Beirut al paso de los coches que transportan a familias que, una vez más, han de buscar un nuevo hogar después de que un obús haya destrozado lo que quedaba de sus últimos refugios.


Ésta es la sensación que nos quiere transmitir Zeina Abirached a través de su cómic El juego de las golondrinas. Nos sitúa en una noche de bombardeos en el Beirut de 1984, donde todos los vecinos de un bloque se juntan en la entrada de la vivienda que parece tener más gruesos sus muros.


“Como vivíamos en la primera planta, que era la menos expuesta a los obuses, la entrada de nuestra casa era el cuarto más seguro de todo el edificio… Y los vecinos habían cogido la costumbre de venir todas las noches de bombardeo”.


Conforme van llegando los vecinos a la casa de la niña protagonista, la autora (esa niña) nos va mostrando un poco de la vida de cada uno de ellos, cómo llegaron a su situación y qué futuro les espera. El cómic es sólo el transcurso de una noche y, con ello, nos hacemos una idea de la angustia que vivió el pueblo libanés durante la guerra, la primera, porque en 2006 la historia volvería a repetirse.


“Francotiradores, barriles metálicos, containers, alambre de espino, sacos de arena modelan una nueva geografía”.


Pero Abirached no carga las páginas de sensiblería dramática sino que, sencillamente, cuenta las cosas como fueron, sin emitir juicios de valor ni enmascarando la realidad con sus ojos críticos. El dramatismo se transmite solo, por la crudeza de los hechos y ayudados, eso sí, por la sobriedad de los dibujos, llenos de poesía y de repeticiones cargadas de sutiles significados.





He de confesar que el contenido narrativo del libro me defraudó un poco pues me ha parecido excesivamente escaso. Pero supongo que el problema ha sido mío, pues me esperaba otra cosa. Así pues, si vas a leer este cómic, que merece la pena por el uso que hace del estilo artístico del dibujo (que recuerda, por cierto, al de Marjane Satrapi, autora de Persépolis) tienes que hacerlo sin esperar una gran historia sobre el conflicto del Líbano, sin esperar la historia de la protagonista o el gran drama allí vivido. Este libro cuenta, sencillamente, una noche de bombardeo en la que los vecinos de un bloque se han reunido a esperar que pase. A partir de ahí, el lector es quien debe extrapolar lo que está leyendo y sacar sus propias conclusiones pues Abirached no lo hace por nosotros. Ella está bien distante.


La wikipedia dice:


Este post recomendó:
El juego de las golondrinas de Zeina Abirached (2008, ed.: Sins Entido).


1 comentario:

Fernanda dijo...

sabès¿?
antes que nada holiitas!
anduve hiper desaparecida, es que es que muchisimas cosas, tanto buenas como algunas no tanto jaja, pero màs bien las buenas fueron geniales(= en definitiva... yo leì tambièn el juego de las golondrinas y como dices y o por simpatizarte, si bien sabes que siempre he dado mi opinion jà, a mì me pareciò falto de contenido tambièn, quizà porque especulè y epseraba màs.. pero son cosas que pasan, me habia pasado con otra cosa que habìa leìdo de un escritor argentino, que no mehabia parecido que lefalte nada sino que me aprecia que era muy muy egocentrico el hombre y me desilucionè.
Ya subirè cosas al face (pagina del libro) y te lo avisarè) perdòn es que estuve muy colgada.
Me voy de vacaciones al norte d emi pais y estoy muy feliz pro ello!
un beso gigante y sì sì tù tambien te habias ausentado he! nunca te desaparezcas todo un año, no denuevo.


(= un abrazo a la distancia amiga.

Atipica e Imperfecta